5 Tips Para Crear Una Estrategia De Marketing Experiencial

El enfoque de los nuevos tipos de marketing deja a un lado lo común y se centran en impactar de manera individual.

Con el cambio de siglo nos hemos enfrentado a diferentes maneras de interactuar y atraer a nuestros clientes. Hoy el marketing tradicional, que se enfocaba en establecer estrategias de productos, nichos, precios y que realizaba comunicación masiva, es cada vez más obsoleta, por lo que solo vive en aulas de universidades y en libros anticuados.

Por esta y más razones, el marketing experiencial llega como la mejor alternativa para poder lograr los principales objetivos a nivel interno y externo de las empresas. Enfocándose principalmente en:

Recuperar una marca que se encuentra cuesta abajo.
Diferenciar empresas entre un mar de marcas.
Fortalecer la imagen y estrategia de una marca.
Promover logros y demostrar resultados.
Atraer nuevos consumidores con ayuda de pruebas, compra y referencia.

Las herramientas y métodos del marketing son eclécticos, no es imperativo su uso al pie de la letra.

Es importante tener un consciente proceso de branding, en donde tengamos claro la plataforma de marca, estrategia, personalidad, arquitectura de marca y filosofía, pues estos factores determinarán el éxito y los posibles caminos creativos que se tomarán para generar una experiencia. Todo esto es valioso para poder poner en practica los principales consejos, logrando que tu experiencia sea única y memorable.

1. Las emociones son el principal objetivo

Este es el punto inicial en el que cualquier marca se enfrenta a una necesidad u objetivo en concreto. En este lugar es donde debemos preguntarnos cuál es la principal meta, teniendo en cuenta que los clientes están buscando de nosotros es despertar recuerdos o emociones. El establecer un objetivo conciso crea mayores oportunidades a la hora de diseñar estrategias.

2. Creatividad sobre ejecución

El proceso creativo debe solucionar el objetivo general de la experiencia, encontrando caminos llamativos, los cuales serán llevados a producción. Debemos conocer la marca y cómo se comporta los consumidores, de esta manera podemos establecer insights que nos conectará con las personas de manera fácil. El producir una estrategia sin esto puede dar como resultado experiencias vacías e intrascendentales para la vida de las personas.

3. Hazlo simple

Diseñar una experiencia debe ser un proceso fluido que no se permita el espacio para improvisar. Por lo que al momento de crear actividades o estrategias se debe pensar en cada detalle, siempre teniendo en cuenta el concepto como base de toda construcción. Una experiencia simple, pero con gran significado es la que se queda en la mente de las personas, además que, a nivel de ejecución, ahorrara costos y tiempo.

4. Conoce a tus clientes

Finalmente, mediremos el alcance de nuestra estrategia, obteniendo métricas exactas según los objetivos propuestos al inicio. Esto no solo nos mostrará la evolución de nuestros clientes, también nos enseñará espacio de mejor en futuras estrategias. Es aquí en donde extraeremos los errores más relevantes, potenciando los logros y acciones que fueron positivas para la empresa.

5. Moderniza tus herramientas

Las experiencias diseñadas deben ser realizables en un espacio tanto físico como virtual, es por esta razón que la planeación determinará el lugar y momento ideal para su realización. En los entornos que evolucionan constantemente debemos tener en cuenta que las mejores herramientas permiten una mejor experiencia, manteniendo a la marca fresca y con procesos eficientes. Estar en constante búsqueda de cómo mejorar hace que los clientes reciban lo mejor, fidelizándolos asertivamente.

Las herramientas y métodos del marketing son eclécticos, por lo que debemos adaptarnos tanto a diferentes públicos como a la época en la que vivimos.

En la creación de experiencias debemos ser conscientes que el objetivo es desarrollar memorias lo suficientemente relevantes para las personas, que sirvan como un punto de partida para generar un imaginario de marca. En pocas palabras, la percepción que se lleven de las actividades realizadas es lo más importante, por esa razón debemos impactar no solo visualmente, también debemos diseñar un ambiente cuyos elementos tengan relevancia para lograr los objetivos de mercadeo.

Este tipo de marketing se enfoca en las sensaciones que se pueden generar y como estas promueven la transformación de comunicación a ventas. El diferenciar a las empresas con sensaciones es una labor que requiere el conocimiento cercano de los clientes, su comportamiento y lo que buscan en los servicios o productos. La publicidad emocional estándar no es suficiente para ser considerada marketing sensorial, pues estas no buscan crear una conversión o reafirmar el compromiso de las personas. Para esto necesitamos producir estímulos comprendiendo su trasfondo de lo que puede provocar en las personas, así como las reacciones del consumidor al convertir perspectiva en empatía.

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